Detonan explosivo en casa de preso del penal
La detonación de un artefacto explosivo en una vivienda, cuyo propietario es padre de un sujeto que está recluido en el penal de Chiclayo, alarmó a los vecinos de la urbanización La Ciudadela, en la ciudad de Chiclayo. Ante este hecho, los agentes de la Unidad de Desactivación de Explosivos (UDEX) verificaron los daños que originó el atentado. Los actos delictivos, para amedrentar o por un ajuste de cuentas, van en aumento en la ‘Capital de la Amistad’, lo cual atemoriza a los ciudadanos, que exigen más atención de las autoridades policiales. Es preciso mencionar, que el atentado se registró en el inmueble, ubicado en la manzana LL, lote 10, de la urbanización La Ciudadela. El dueño de la propiedad, Wilmer Mondragón Quispe, de 60 años, informó a los efectivos policiales que es la segunda vez que su vivienda sufre un atentado.
En esa línea, el agraviado manifestó que este incidente que perpetraron sujetos en proceso de identificación sería en represalia por actos que cometió su hijo Jean Paúl Mondragón Córdova, de 25 años, quien es reo del penal de Chiclayo. Esta información tomó en cuenta el personal policial para el desarrollo de las investigaciones.
No obstante, el equipo de policías especializados realizó diligencias, por ejemplo, la constatación de los daños materiales que causó la detonación del artefacto explosivo, el cual fue colocado en la ventana de la casa. También se verificó que el área de la sala, así como los muebles y sillas, resultaron afectados.
En menos de una semana, dos atentados
El sábado 24 de febrero, delincuentes detonaron un explosivo en la vivienda del alcaide del penal de Chiclayo, región Lambayeque. Este hecho generó la intervención de la Policía Nacional del Perú (PNP) en el afán de identificar a los hampones. Las agujas del reloj marcaban las 3:30 a. m., cuando un fuerte ruido despertó a los habitantes de la vivienda, ubicada en la calle Mantara Nº 305 del pueblo joven San Nicolás, de propiedad del alcaide del establecimiento penitenciario, Ulises Edward Baldarrago Belizario, de 47 años.
El agraviado contó a los agentes policiales que escuchó una fuerte detonación en la puerta del primer nivel de su inmueble. También indicó que encontró residuos del explosivo, así como de concreto debido al desprendimiento de una parte de la pared. Es preciso indicar, que la vivienda tenía un letrero en el que se lee la palabra ‘licorería’, lo cual amplía el contexto del hecho delictivo que investiga el Área Antiextorsiones de la Divincri.
