“Fui su aventura y no la quiero perder”
Julio (26) La Victoria.- Dra. Katiuska, hace seis meses llegué a Chiclayo, luego que me dejaron plantado el día de mi boda en un caserío de la ciudad de Cajamarca.
Un familiar me recomendó para trabajar como seguridad en un condominio, donde me daban techo. Todo iba bien hasta que hace dos meses conocí a Erika, una joven de 25 años, casada, que un día me pidió que la ayudara a limpiar su departamento y acepté.
Nos hicimos amigos y me confesó que su marido la tenía abandonada, pues más se la pasaba trabajando. En mis tiempos libres me pedía que la acompañara al supermercado a pasear a sus mascotas, incluso hasta me invitaba a almorzar o a cenar. Todas esas atenciones y como estoy solo en Chiclayo hicieron que me enamorara de ella y mantuvimos una relación clandestina, hasta que su pareja se enteró y ahora no quiere saber nada de Erika. Doctora, la cosa es que yo la amo y no quiero perderla, su esposo ya la despachó de su departamento y ella está ahí que le ruega. Espero que ayude con este amor que no me deja dormir.
Consejo:
Querido Julio, tan muchacho y metiéndote en problemas. Con lo que cuentas es que no has podido superar el duelo cuando te dejaron plantado en el altar y ya te enamoraste de otra chica, se nota que no quieres estar solo.
Como dices, Erika no quiere contigo, porqué presionarla. Es necesario que vayas a terapia para que te ayuden a sanar tus heridas y miedos.
