11 de mayo de 2025

Agricultor y agente de seguridad terminan “marcados”

Marcados para toda la vida terminaron un agricultor y un agente de seguridad, pues resultaron con cortes en diferentes partes del rostro tras ser atacados con picos de botella de vidrio en Tumán y Chiclayo.

El primer atentado fue contra José Heriberto Vitón Coronel (43) y ocurrió la madrugada del último domingo en circunstancias que retornaba a su domicilio en compañía de su amigo Jaime Rafael Campos (47), luego de haber participado de una reunión familiar en el sector Jarrín del distrito de Tumán.

El agraviado explicó que cuando ayudaba a llevar cajas de cerveza a su amigo Jaime Rafael con dirección a su domicilio, este comenzó a insultarlo sin motivo alguno, por lo que él le increpó su mala actitud y lo empujó al pavimento. Ante ello, Jaime Rafael se puso de pie y  rompió una botella de vidrio para con el pico ocasionarle un corte en la frente, además, tras jalarlo de su casaca, le cortó parte de la mejilla y oreja -lado izquierdo-, y posteriormente optó por retirarse.

Al hospital

Tras observar que se desangraba, se dirigió a su domicilio, donde con ayuda de sus familiares fue derivado al Hospital Referencial de Tumán. Allí, el personal médico le informó que por falta de implementos no lo podían atender, por lo que se trasladó al hospital Las Mercedes, donde suturaron sus heridas colocándole más de 15 puntos.

“Desconozco la actitud de mi vecino para que me agreda de esta manera, pues ambos hemos estado departiendo en una reunión, incluso regresábamos juntos a nuestras viviendas, pero comenzó a insultarme de la nada. Solo quiero que me reconozca todo el daño que me ha ocasionado”, precisó José Vitón.

Periodistas de El Norteño tomaron conocimiento que en este hecho, el presunto agresor Jaime Rafael Campos había denunciado a José Vitón Coronel argumentando que en el momento que lo empujó también le ocasionó lesiones, pues dijo que la caja de cerveza que llevaba cayó al suelo y una de las botellas se rompió y le cortó su brazo derecho.

En discoteca 
En el segundo caso, el agente de seguridad Fernando Alonso Alcedo Samamé (29) fue atacado por un delincuente, en proceso de identificación, en circunstancias que cuidaba en una discoteca, situada en la cuadra 1 de la avenida José Leonardo Ortiz de Chiclayo.

El agraviado dijo que la madrugada del reciente sábado, cuando se encontraba en la puerta de acceso a la discoteca, aparecieron tres personas en estado de ebriedad que quisieron ingresar al local nocturno, pero no les permitió la entrada y solicitó que se retiren.

Sin embargo, a los pocos minutos, cuando estaba parado en el exterior de la discoteca, llega un sujeto y a traición lo ataca con un pico de botella, ocasionándole cortes en el cuello y en la oreja, para posteriormente perderse entre la multitud.

Con ayuda de sus compañeros de seguridad, el agente fue derivado al hospital Las Mercedes de Chiclayo, donde fue atendido por el médico de turno, quien le diagnosticó herida cortante en región cervical y agresión por terceros. Además, se determinó que se quede en observación.

En ambos casos, el personal policial de permanencia en el nosocomio elaboró las actas con respecto a los atentados, para después derivarlas a sus colegas de la comisaría César Llatas Castro y comisaría de Tumán a fin de que realicen las diligencias conforme a ley.

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